MI CRISTY Y MI WALE


En esta experiencia llamada vida, nos acompañan en nuestro andar una serie de personitas especiales que hacen que este trayecto sea mucho más agradable y dulce. Entre estos seres maravillosos se encuentran nuestros verdaderos amigos, quienes se convierten muchas veces en nuestro escudo para enfrentar los escollos o en los testigos de nuestras penas, alegrias, errores y aciertos.El post de hoy (mira Guille como voy aprendiendo palabras), va dedicado a dos de mis
angelitos, mi Cristy y mi Wale, y por medio de ellas, a quienes son o han sido mis amigas a lo largo de mi existencia.
Antes de continuar, quiero aclarar que siempre me ha sido difícil tener amigas. Desde la adolescencia, tengo la noción que mis grandes confidentes han sido hombres. Si me preguntan porqué, la respuesta es casi lógica y media cliché: "el ego femenino es bastante más sensible". Nos cuesta perdonarnos , nos molesta que una sea más linda, flaca o alta que la otra, nos peleamos por el amor de un niño, o, simplemente, nuestras afinidades no sobrepasan el gusto por la ropa, los hombres, salir a vitrinear o carretear.
Claro que la amistad femenina, desde mi humilde punto de vista, tiene distintas fases:

- En la niñez, tienes amigas con las que juegas a pintar, a las profesiones, a las muñecas....pero si te llegan a quitar un juguete o si te acusan por algo, hasta ahí llegó todo.

- En el colegio, principalmente en la adolescencia, no faltaba la que se hacía pasar como tu mejor amiga, con el sólo propósito de quitarte a tu pololo o conquistar a uno de tus amigos.

- En la universidad, se crean lazos muy fuertes: las mujeres de provincia, somos especialistas en crear pequeños grupos y espantarnos ante las peripecias de las que son avispadas que nosotras. Y ¡Pobre de la que se vuelva suelta!, que se convierte en una loca, paria y mala mujer (cuantas veces escuche esas cosas en el puerto, jajaja). Pero de esa época conservo a mis Pepes Grillos que hasta el día de hoy me hacen entrar en razón (Gracias Enanita, Cuadrúpeda, Macarrana, Barbaritz y Ale).

- Y cuando empieza la vida laboral, especialmente cuando has estado mucho tiempo lejos de tu ciudad de origen, es natural establecer lazos con tus colegas y muchas veces lo que comienza como una linda amistad, intercambiando consejos de belleza, recetas y vivencias, a los pocos meses puede convertirse en un verdadero martirio, con puñaladas feroces.
Luego de escribir todo esto, comprenderán porque me cuesta tener amigas, me han hecho las mil y una, como se diría vulgarmente. A lo mejor yo tampoco he sido una buena amiga, pero he intentado ir en la vida de frente y ser como soy (lo cual no es muy fácil de entender a veces, ya les describí mi personalidad). Pero, como señalé en el primer post de este blog, no me van a quitar la esperanza de ver a los seres humanos desde una perspectiva más dulce. Y mucho de esto se lo debo a la Cristy y a la Wale.

La Cristy es mi amiga mayor, no quiero decir su edad (porque o si no me mata o terminaría colgada en una de las palmeras de la Plaza), pero podemos decir que cuando Antonio Manso de Velasco fundó la ciudad de Curicó, esta loquilla lo estaba esperando con unos exquisitos platos de comida y con ese pisco sour engañador que sólo ella sabe hacer (son tallas Rahmercita, con cariño, jajaja). Si tuviera que definir a esta mujer con una palabra, sería BONDAD. Para mi se ha convertido en mi ángel de la guarda, en una guía que intenta enseñarme (a coscorrones a veces), a ser un mejor ser humano. Siempre tiene la palabra justa, una sonrisa, un consejo y el tirón de orejas que me obliga a darme cuenta de que no existen sólo el blanco y el negro, sino un arcoiris infinito de colores. También me ha enseñado a reirme con ganas, a contar hasta mil antes de estallar (pucha que me ha costado esa lección), a combinar los colores, a preparar ricos platos y a ser más tolerante. Mi Cristy, espero que sigamos compartiendo milliones de peripecias, almuerzos, historias (bueno, tu eres la historia en si misma, jajaa). Eres uno de los mejores seres humanos que ha creado Dios y me siento muy afortunada por contar con tu amistad. Sólo te pido que te cuides y que si bien ya no eres una niña (cronológicamente), siempre mantengas ese espíritu jovial y bondadoso que nos inunda de alegría a todos los que tenemos la suerte de ser tus amigos. Te quiero mucho amiga.

Y por otra parte, está mi Wale, mi amiguita menor (por edad). En este caso la dinoasauria soy yo. Cuando la Wale nació, yo tenía cerca de 10 años. O sea ella no conoció a Marco, ni Remy, ni JEM y las Misfits, ni usó zapatos pluma, ni le gustaban los New Kids on The Blocks, ninguna de las cosas que me marcaron generacionalmente. No había nacido para el plebiscito del SI y el NO, ni creció escuchando a Silvio o a los Inti. Pero desde que nos conocimos, nos dimos cuenta que somos demasiado parecidas: tenemos la misma risa, somos enfermas de coquetas, nos afectan las mismas cosas y somos extremadamente sensibles. Verla es mirarme a mi misma a los 17 años, con la diferencia de que a esa edad yo ni siquiera era la mitad de cuerda, madura y conciliadora que es ella. Somos igual de soñadoras, idealistas, enamoradizas y ahora nos une el cuidado de 19 hermosos chiquiturris (quienes protagonizarán algún post más adelante), a los que intentamos preparar para que realicen la primera comunión. Es mi yunta, confidente, siempre atenta a lo que pasa, con un corazón inmenso. Si tuviera que definirla en una palabra, sería INCONDICIONALIDAD: Siempre se da el tiempo para escuchar, ayudar y entregar cariño a quien lo necesite. A tu corta edad me has demostrado que se puede ser madura e infantil al mismo tiempo y que siempre hay tiempo para servir a los demás. Nos quedan muchas historias por vivir y muchas cosas por hacer y cuenta conmigo en cada paso del camino. Y nunca olvidaré tu sabio pensamiento: "Cuando se te vaya una idea, voltea la cabeza para que se produzca la sinapsis" (estuve una semana con tortícolis, por andar haciendo a cada rato esa gracia, jajajaja).Gracias por todos los momentos lindos, ridículos y absurdos que hemos vivido juntas y especialmente gracias por escuchar tanta tontera que te cuento (Thanks a lot!!! Te debería decir ahora, saludos a Oklahoma, jajajajaja).
Mis dos amigas, a quienes las separan más cuatro décadas, están unidas por cualidades que sobrepasan las generaciones: La lealtad, la entrega, la alegría de vivir y la generosidad. A Cristy, Waleska y a mis pocas pero buenas amigas, les dedico todas estas palabras (Ali, Isa, Claudia V, Pingrid, Xiqueta, Carmencita, Bárbara y por supuesto a mi hermana y a mi madre) y aquí va esta última y febril idea:

Gracias por permitirme reconciliarme con el género femenino!!!!

Las quiero mucho.


GMY

5 comentarios:

Anónimo dijo...

uuuuuuufff..aunque era muy largo y me carga leer...disfrute la entrada de tu blog..escribes muy bien...hahah no por nada eres periodista...si serè volá...
MUCHAS GRACIAS POR LO QUE ME TOCÒ...
pa ser primerisa en esto de los ciber espacios lo haces muy bien..sigue asi..
nos vemos
chau

Graciela Molina Yáñez dijo...

Muchas gracias Ali por las lindas palabras, se hace lo que se puede.Nos estamos viendo pronto y me alegra que estés empezando a leer, jajajajaja. Te quiero mucho.
Besitos

Unknown dijo...

Gracias xeli por tus palabras hacia mi, me alagas con la palabra con la que me definías (incondicionalidad), yo también te quiero mucho amiga...

Mentirosilla igual que todos... me engañaste, dijiste ke tal vez pasarías de pasadita a mi casa el viernes...gracias por todo amiga... y por tu regalo...
te quiero

chao

Anónimo dijo...

hola monita, que linda la visita que nos hiciste a mí y a facundito, desde ya te cuento que me fuí a mi casita nueva así que espero verte prontooo por allá... tengo la fotito que te sacaste con facu te la enviaré...

y con respecto a tu comentario la verdad conocí a cristina y pienso que tener una amistad tan transparente con tanta intensidad lo encuentro lo maximo y espero que su lazo tan bello lo conserven para toda la vida... como dicen por ahí "mientras dure la vida" besitos para tí y para cristi...
te mandamos besitos facu y yo..

Anónimo dijo...

De acuerdo con Ali.. cuando vi lo extenso del texto y lo ke se demoraba la pantalla en moverse para encontrar el inicio de él, pensé ke me aburriría antes de terminarlo pero no fue así :D
A mi parecer no tienes mucha pinta de periodista.. tengo la imagen del periodista más frío, calculador, ambicioso y amarillista, na ke ver con una mujer de mirada tan dulce.